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domingo, 20 de mayo de 2018

¿Por qué los gatos no deberían tomar leche

La gente ha estado dando leche a sus gatos durante el tiempo que la mayoría de nosotros podemos recordar, pero la verdad es que no es bueno para ellos.
Tengo dos gatas y sabía de este tema pero para documentarme mejor decidí hablar con mi veterinario al respecto. Esto es lo que me explicó.
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Esta es mi gata Dunna, una persa preciosa que ahora tiene 16 años
Parece natural darle leche a los gatos. A la mayoría de los gatitos les encanta, y en el pasado, se consideraba como comida tradicional para la mayoría de los gatos domésticos. Pero resulta que no es realmente una buena idea. De hecho, alimentar a nuestros gatos con leche no es algo que los veterinarios y otras autoridades felinas fomenten.

¿Los gatitos no necesitan leche?
Los gatitos dependen de la leche, pero solo de las mamás. Cuando tienen entre cuatro y diez semanas de edad, comienzan a madurar y a abandonarla, se produce el llamado destete. Esto es cuando sus cuerpos dejan de producir una enzima llamada lactasa. Esta enzima descompone el contenido de azúcar que se encuentra en la leche de la madre y permite que el gatito la digiera correctamente. Alrededor de los seis meses de edad, la capacidad de un gato para producir lactasa será a los niveles de los gatos adultos, que son significativamente más bajos que los niveles de los pequeñitos.
A medida que la lactasa desaparece del sistema de un gato en crecimiento, también lo hace su capacidad para digerir la leche. La mayoría de los gatitos se vuelven lentamente intolerantes a la lactosa a medida que maduran y se convierten en gatos adultos, aunque no todos los gatos son intolerantes a la lactosa. La capacidad de cada gato para digerir la lactosa es diferente .
¿Por qué a los gatos les gusta tanto la leche?
Entonces, ¿por qué los gatos beben leche tan fácilmente cuando sus sistemas digestivos pueden no ser capaces de manejarlo? Es simple: es fresca y fría, y les gusta el sabor. Compárenlo con los niños que aman los dulces y, si se les da la oportunidad, comerán todo lo que puedan. Los gatos son similares en lo que respecta a la leche.
¿Qué hace que la leche sea mala para los gatos?
En la mayoría de los casos, una cucharadita ocasional no debería hacerle ningún daño a tu gato, pero no lo conviertas en un hábito. La leche que bebemos no es apta para gatos. La leche que tomamos es pasteurizada, cambia la proteína. Cuando se homogeniza, las partículas se filtran a través de la pared intestinal, causando inflamación en el organismo del animal. Demasiada puede causar diarrea, gases y otros trastornos digestivos. Los productos lácteos como el queso y el helado pueden provocar los mismos problemas digestivos si los gatos comen demasiado.
¿Realmente pueden prescindir de la leche?
La respuesta es sí. Por mucho que le guste a tu gato, no lo necesita en su dieta. De hecho, realmente no tiene beneficios nutricionales para él. Una vez que un gato es destetado de la leche de su madre y pasa a la comida sólida, todo lo que realmente necesita para beber es agua. La mayoría de los veterinarios están de acuerdo en que dar leche a los gatos causa más problemas de salud que nada. El agua, es la mejor forma de hidratación y definitivamente esencial para su salud. Agregar un poco del líquido de una lata de salmón u otro pescado enlatado al agua de su cuenco lo alentará a beber más, ¡e incluso puede frenar su pasión por la leche!
La leche de cabra puede ser una alternativa saludable
Si todavía no puedes resistirte a compartir leche con tu gato, se recomienda cambiar a productos que sean más fáciles para el sistema digestivo sensible de un gato.
Lo mismo puede aplicarse al queso. El queso de cabra tiende a ser más fácil de digerir que el queso hecho con leche de vaca.

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