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viernes, 8 de junio de 2018

Qué es el túnel carpiano y sus causas

El síndrome del túnel carpiano, (STC) también llamado “el mal de las secretarias”, da nombre a un grupo de problemas que incluyen hinchazón, dolor, hormigueo y pérdida de fuerza en la muñeca y la mano.
La muñeca está hecha de pequeños huesos que forman un surco estrecho o túnel carpiano. Los tendones y un nervio llamado nervio mediano deben pasar a través de este túnel desde el antebrazo hasta la mano. El nervio mediano controla las sensaciones en la palma, el pulgar y los dedos. A veces, la hinchazón y la irritación de los tendones pueden ejercer presión sobre el nervio de la muñeca, causando los síntomas del STC. La mano dominante de una persona es la que generalmente se ve afectada. Sin embargo, casi la mitad de los pacientes con STC tienen síntomas en ambas manos.
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Síntomas

Por lo general, el STC comienza lentamente con sensación de ardor, hormigueo y entumecimiento en la muñeca y la mano. Las áreas más afectadas son los dedos pulgar, índice y medio. Al principio, los síntomas pueden ocurrir más a menudo por la noche. Muchos pacientes con STC no establecen la conexión entre una actividad diurna que podría estar causando el síndrome y los síntomas aparecen más tarde. Además, muchas personas duermen con la muñeca flexionada, lo que puede causar más dolor y síntomas por la noche. A medida que STC empeora, el hormigueo se puede sentir durante el día también, junto con el dolor que se mueve desde la muñeca hasta el brazo o hasta los dedos. El dolor generalmente se siente más en el lado de la palma de la mano.

Otro síntoma de STC es la debilidad de las manos que empeora con el tiempo. Algunas personas con encuentran difícil agarrar un objeto, cerrar un puño o agarrarse a algo pequeño. Los dedos incluso pueden sentir que están hinchados aunque no lo estén. Con el tiempo, esta sensación generalmente ocurrirá más a menudo.
Si no se trata, las personas con STC pueden tener pérdida de sensibilidad en algunos dedos y debilidad permanente del pulgar. Los músculos del pulgar en realidad pueden consumirse con el tiempo. Eventualmente, los pacientes con STC pueden tener problemas para distinguir la diferencia entre las temperaturas cálidas y frías al contacto.
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¿Qué causa STC y quién es más probable que lo desarrolle?

Las mujeres tienen tres veces más probabilidades de tener CTS que los hombres. Aunque hay investigaciones limitadas sobre por qué este es el caso, los científicos tienen varias ideas. Puede ser que los huesos de la muñeca sean naturalmente más pequeños en la mayoría de las mujeres, creando un espacio más estrecho a través del cual deben pasar los nervios y los tendones. Otros investigadores están estudiando los vínculos genéticos que hacen que sea más probable que las mujeres tengan lesiones musculoesqueléticas como CTS. Las mujeres también lidian con fuertes cambios hormonales durante el embarazo y la menopausia que los hacen más propensos a sufrir de CTS. En general, las mujeres tienen un mayor riesgo de CTS entre las edades de 45 y 54. Luego, el riesgo aumenta tanto para hombres como para mujeres a medida que envejecen.
Existen otros factores que pueden causar CTS, incluidos ciertos problemas de salud y, en algunos casos, la causa es desconocida.
Estos son algunos de los factores de riesgo que pueden aumentar las posibilidades de desarrollar el STC:
Predisposición genética. El túnel carpiano es más pequeño en algunas personas que otras.
Movimientos repetitivos. Las personas que hacen los mismos movimientos con las muñecas y las manos una y otra vez pueden tener más probabilidades de desarrollar el síndrome.
Las personas con ciertos tipos de trabajos tienen más probabilidades de tener STC, incluidos los trabajadores de fábricas y línea de montaje, los inspectores de tiendas, los violinistas y los carpinteros. Algunos pasatiempos y deportes que usan movimientos repetitivos de la mano también pueden causar STC, como el golf, tejido de punto y jardinería. Aún es motivo de debate si a largo plazo la mecanografía o el uso de computadoras causa STC. La investigación limitada apunta a un eslabón débil, pero se necesita más investigación.
Lesión o trauma. Un esguince o una fractura de muñeca puede causar hinchazón y presión sobre el nervio, lo que aumenta el riesgo de STC. Los movimientos forzados y estresantes de la mano y la muñeca también pueden causar trauma, como fuertes vibraciones causadas por maquinaria pesada o herramientas eléctricas.
El embarazo. Los cambios hormonales durante el embarazo y la acumulación de líquido pueden poner a las mujeres embarazadas en mayor riesgo de contraer STC, especialmente durante los últimos meses. La mayoría de los médicos tratan el STC en mujeres embarazadas con férulas para la muñeca o en reposo, en lugar de cirugía, ya que el STC casi siempre desaparece después del parto.
Menopausia. Los cambios hormonales durante la menopausia pueden poner a las mujeres en mayor riesgo de contraer STC. Además, en algunas mujeres posmenopáusicas, las estructuras de la muñeca se agrandan y pueden presionar el nervio de la muñeca.
Cáncer de mama. Algunas mujeres que se someten a una mastectomía tienen linfedema, la acumulación de líquidos que van más allá de la capacidad del sistema linfático para drenarlo. En pacientes con mastectomía, esto causa dolor e inflamación del brazo. Aunque es raro, algunas de estas mujeres tendrán STC debido a la presión sobre el nervio debido a esta hinchazón.
Condiciones médicas. Las personas que tienen diabetes, hipotiroidismo, lupus, obesidad y artritis reumatoide son más propensas a contraer STC. En algunos de estos pacientes, las estructuras normales en la muñeca pueden agrandarse y conducir a un STC.
Además, los fumadores con STC suelen tener síntomas peores y recuperarse más lentamente que los no fumadores.
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Cuál es el tratamiento?

Es importante que lo trate un médico para evitar daños permanentes en el nervio de la muñeca y los músculos de la mano y el pulgar. Las causas subyacentes, como la diabetes o un problema de tiroides, deben abordarse primero. Si no se trata, el STC puede causar daño a los nervios que conduce a la pérdida de la sensibilidad y la fuerza en la mano. Con el tiempo, los músculos del pulgar pueden debilitarse y dañarse. Incluso puede perder la capacidad de sentir calor y frío al tacto. La lesión permanente ocurre en aproximadamente en el 1% de aquellos con STC.
El síndrome es mucho más fácil de tratar desde el principio. La mayoría de los pacientes mejoran después de los tratamientos primarios y los consiguientes consejos para proteger la muñeca.
Los tratamientos para STC incluyen los siguientes:
Férula de muñeca. Se puede usar una férula para apoyar y sujetar la muñeca en una posición neutral para que los nervios y los tendones puedan recuperarse. Una férula se puede usar las 24 horas del día o solo por la noche. A veces, usar una férula en la noche ayuda a reducir el dolor. La ferulización puede funcionar mejor cuando se realiza dentro de los tres meses posteriores a la aparición de cualquier síntoma de STC.
Descanso. Para las personas con STC leve, parar o hacer menos de un movimiento repetitivo puede ser todo lo que se necesita. Es probable que su médico le hable sobre los pasos que debe seguir para evitar la reaparición.
Medicación. El uso a corto plazo de medicamentos antiinflamatorios no esteroideos (AINE) puede ser útil para controlar el dolor del STC. Los AINE incluyen aspirina, ibuprofeno y otros analgésicos sin receta. En casos severos, una inyección de cortisona puede ayudar a reducir la hinchazón. Su médico también puede administrarle corticosteroides en forma de píldora. Pero estos tratamientos solo alivian los síntomas temporalmente. Si el STC es causado por otro problema de salud, su médico probablemente tratará ese problema primero. Si tiene diabetes, es importante saber que el uso prolongado de corticosteroides puede dificultar el control de los niveles de insulina.
Terapia física. Un fisioterapeuta puede ayudarle a hacer ejercicios especiales para fortalecer la muñeca y la mano. También hay muchos tipos diferentes de tratamientos que pueden mejorar el STC y ayudar a aliviar los síntomas. El masaje, el yoga, el ultrasonido, la manipulación quiropráctica y la acupuntura son solo algunas de las opciones que se han encontrado útiles. Debe hablar con su médico antes de probar estos tratamientos alternativos.
Cirugía. La cirugía es una de las más comunes. Generalmente, la cirugía es solo una opción para casos severos de STC y / o después de que otros tratamientos hayan fallado por un período de al menos seis meses. La cirugía de liberación abierta es un enfoque común para esta cirugía e implica hacer una pequeña incisión en la muñeca o la palma de la mano y cortar el ligamento para agrandar el túnel del carpo. Esta cirugía se realiza bajo anestesia local para adormecer la muñeca y el área de la mano y es un procedimiento ambulatorio.
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La mejor forma de prevenir el STC

La investigación actual se centra en descubrir qué causa el STC y cómo prevenirlo. El Instituto Nacional de Trastornos Neurológicos y Accidentes Cerebrovasculares (NINDS) y el Instituto Nacional de Artritis y Enfermedades Musculoesqueléticas y de la Piel (NIAMS) apoyan la investigación sobre los factores relacionados con el trabajo que pueden causar el STC. Los científicos también están investigando mejores formas de detectar y tratar el síndrome, incluidos tratamientos alternativos como la acupuntura.
Los siguientes pasos pueden ayudar a prevenir STC:
Prevenga la lesión musculoesquelética en el lugar de trabajo. Asegúrese de que su espacio de trabajo y equipo estén a la altura y distancia correctas para que sus manos y muñeca funcionen con menos tensión. Si está trabajando en una computadora, el teclado debe estar a una altura que permita que su muñeca descanse cómodamente sin tener que doblarla en ángulo. El espacio de trabajo del escritorio o la mesa debe estar entre 68 y 74 centímetros por encima del suelo para la mayoría de las personas. También ayuda a mantener los codos cerca de los costados a medida que escribe para reducir la tensión en el antebrazo. Mantener una buena postura y la posición de la muñeca puede reducir el riesgo de contraer STC.
Tomar descansos. Permitir que la mano y la muñeca descansen y se recuperen de vez en cuando reducirá el riesgo de hinchazón. Los expertos creen que tomar un descanso de 10 a 15 minutos cada hora es una buena manera de prevenirlo.
Variar las tareas. Evitar los movimientos repetitivos sin cambiar la rutina. Intente hacer tareas que usen diferentes movimientos musculares durante cada hora. Divida las tareas que requieren movimientos repetitivos de muñeca y mano con aquellas que no lo hacen.
Relajar la presión de agarre. A veces, las personas adquieren el hábito de tensar los músculos sin necesidad de hacerlo. Practique haciendo las tareas de movimiento de la mano y la muñeca más suavemente y con menos fuerza. El estrés y la tensión juegan un papel en la tensión muscular y la irritación.
Hacer ejercicios. Después de hacer movimientos repetitivos por un tiempo, es mejor contrarrestar los efectos de esos movimientos flexionando y doblando las muñecas y manos en la dirección opuesta. Por ejemplo, después de escribir con la muñeca y la mano extendida, es útil apretar el puño y sostenerlo por un segundo, luego estirar los dedos y mantenerlos extendidos durante unos segundos. Repetir esto varias veces.
Mantener el músculo abrigado. Los músculos que están calientes tienen menos probabilidades de lastimarse y el riesgo de contraer STC es mayor en un ambiente frío. Es importante mantener las manos calientes mientras trabaja, incluso si debe usar guantes sin dedos.
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